Hay registros de cientos de sueños que predijeron el ataque a las Torres Gemelas del 11 de septiembre y la reciente pandemia mundial. John L. Petersen, un eminente futurista que fundó el centro de estudios del Instituto Arlington en Washington DC, defiende que los sueños pueden ser utilizados por los funcionarios públicos para crear estrategias.
Ya en la Biblia podemos leer que José interpretó los sueños del rey egipcio y evitó una hambruna. En la antigua Roma, la esposa de César soñó con su cuerpo ensangrentado la misma noche antes de su asesinato.
Los sueños premonitorios o precognitivos, son los que anticipan de manera simbólica, y aveces literal, un hecho que sucederá en el futuro.
Veamos si se cumplen estas tres condiciones para decir que nuestro sueño es precognitivo:
No hemos percibido con los sentidos nada que nos permita inferirlo.
No se trata de la elaboración de un deseo o un miedo expresado en el sueño. Esto es difícil de discernirlo. Se desarrolla a través de un comprometido trabajo sobre sí.
En el sueño aparecen sucesos, elementos y relaciones entre ellos (literal o simbólica) que luego, al día siguiente o días después, acontecen en el mundo vigil.
Llevar un diario de sueños ayuda a detectar este tipo de sueños, incluso a descubrir patrones que más adelante te ayudan a saber que lo que has soñado probablemente sucederá.
Si te ha pasado alguna vez, ¿cuál ha sido tu experiencia? ¿Te gustaría compartirla?