"La temporada del fracaso es la mejor para sembrar las semillas del éxito" Yogananda
Este sabio afirmaba que la persistencia garantizaba que los resultados fueran inevitables.
El secreto que, según Yogananda, estaba detrás de la salud mental y física consistía en dejar de llorar por el pasado y también de preocuparse por el futuro. Decía que el pasado caía fuera de nuestro dominio y el futuro estaba más allá de nuestro alcance. Lo mejor que podemos hacer -según sus palabras- es controlar nuestro presente.
Afirmaba que somos los responsables de lo que pensamos, por tanto únicamente en nuestras manos está la capacidad de cambiar nuestros pensamientos. Y dado que nuestro cuerpo está literalmente fabricado y sostenido por la mente, era mejor mirar siempre por el bien para absorber la cualidad de la belleza.
Respecto a la felicidad, decía que si la posees, lo posees todo. Identificaba como un signo de verdadera grandeza el uso de la amabilidad y la sinceridad a la hora de hacer felices a los otros.
Apuntaba a un imán presente en nuestro corazón que era capaz de atraer amigos verdaderos. Ese imán es el desinterés que supone pensar en los otros primero. También aconsejaba que no consideráramos a nadie como extraño e intentáramos sentir que todo el mundo es parecido a nosotros.
Yogananda consideraba que la paciencia era mejor que la valentía. Para él era mejor dominarse a uno mismo que conquistar ciudades.