En que escenario de tu vida suele aparecer “el tío rico de América”
(Otro de nuestros personajes interiores)
Digamos de entrada que probablemente el origen de la expresión “el tío rico de América” se refiera a aquellas personas que consiguieron hacer fortuna más allá de sus fronteras. Individuos expansivos y siempre optimistas. Incluso capaces de llevar sus exageraciones a niveles de ciencia ficción.
Vamos a centrarnos en este “personaje ficticio”, pero buscándolo en nuestro interior, porque difícilmente lo encontraremos fuera. Somos muchos los que no tenemos ningún tío que haya vuelto a casa con una considerable fortuna, en cambio sí conocemos a personas que son capaces de prometer mucho y dar muy poco, porque sus promesas suelen acabar cayendo en saco roto.
Tampoco podemos negar que viviendo en este mundo que nos bombardea a diario con noticias negativas un poco de optimismo puede resultar incluso positivo.
Lo cierto es que todos llevamos en algún lugar de nuestro interior -en mayor o menor grado- a ese personaje expansivo que puede llegar a ser excesivo, incluso capaz de prometer la Luna llegado el caso.
¿Lo conocemos? ¿Nos hemos comunicado en alguna ocasión con él? ¿En qué parte de nuestra personalidad aflora? Tal vez nosotros no seamos capaces de verlo, pero indudablemente nuestros más allegados o íntimos, sí puede que lo tengan identificado.
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PD: Algunos rasgos que pueden identificarlo son: el acelerador, la exageración, el optimismo y lo aparente o engañoso. Ese punto donde creemos que todo es posible… incluso rayando en lo dogmático.